🦴 Recuerdo Anatómico y Funcional del Hombro
🦴 Recuerdo Anatómico y Funcional
La cintura escapular está formada por un grupo de articulaciones que en conjunto se denomina articulación toracoescapulohumeral, las cuales permiten que el hombro sea la articulación de mayor movilidad del cuerpo humano.
La articulación glenohumeral es poco congruente para permitir amplitud de movimientos, pero esta misma característica compromete su estabilidad. Su cápsula articular es laxa y extensa, diseñada para tolerar un gran rango de movilidad.
Por ello, los músculos y tendones que rodean la cabeza del húmero no solo contribuyen al movimiento, sino que cumplen una función estabilizadora esencial, sobre todo durante actividades dinámicas o con carga.
Continuando con el estudio del dispositivo esquelético, llegamos a la implantación del hombro; es decir, a la implantación del miembro superior en el tronco, o séase, a las articulaciones del estilópodo con el basípodo, y de éste con el tronco.
A este nivel, van a tener que realizarse una gran cantidad de funciones, pues todo el dispositivo esquelético del miembro superior está supeditado a las funciones principales de la mano.
Las articulaciones del hombro van a encontrarse en la necesidad de poseer todos los movimientos. Esto nos indica que la articulación del hombro va a tener que ser forzosamente una enartrosis; es decir:
- 🔹 Una esfera maciza rotando en el interior de una esfera hueca.
- 🔹 El húmero proporciona la esfera maciza (solo un tercio es articular).
- 🔹 La cavidad glenoidea es poco profunda para no limitar la movilidad.
- 🔹 El rodete glenoideo permite mantener la forma esférica funcional.
La escápula se aplana sobre la cara posterior del tórax y tiene forma triangular. Sus bordes superior, espinal y axilar la anclan mediante músculos como:
- 🔸 Músculo romboides
- 🔸 Músculo angular del omóplato
Para sostenerse por delante, se apoya en el esternón mediante la cintura escapular, que incluye:
- 🔹 La espina de la escápula
- 🔹 El acromion
- 🔹 La clavícula
La clavícula, en forma de "S itálica", articula:
- 🔸 Por un lado, con el acromion mediante artrodia
- 🔸 Por el otro, con el esternón en una articulación tipo silla de montar
Como no hay congruencia exacta entre las superficies articulares, interviene un fibrocartílago de adaptación que divide en dos la cavidad sinovial.

Figura 1. Representación anatómica del complejo articular del hombro.
Los ligamentos de la articulación glenohumeral se disponen principalmente por la región anterior:
- 🔹 Ligamento supragleno-suprahumeral: desde la porción superior de la cavidad glenoidea a la parte superior de la cabeza humeral.
- 🔹 Supragleno-prehumeral: desde el tercio superior de la glenoides a la cara anterior del húmero.
- 🔹 Pregleno-prehumeral: desde la parte anterior de la glenoides hacia el húmero.
Las luxaciones se producen generalmente por la cara anterior e inferior. En las luxaciones recidivantes, hay un desprendimiento del rodete glenoideo anterior, donde se introduce la cabeza humeral, desplazándose hacia la cara anterior de la escápula.
Estos ligamentos, por sí solos, no son suficientes para mantener la cabeza humeral en su lugar. Por eso, la articulación se ve reforzada por estructuras dinámicas: los tendones musculares.
- 🔸 El bíceps braquial: su porción larga atraviesa la corredera bicipital y se inserta en la porción superior de la cavidad glenoidea.
- 🔸 El deltoides: actúa como deflexor desde el húmero a la cintura escapular.
- 🔸 El tríceps: su porción larga se inserta en rugosidades inferiores de la glenoides.
La estabilidad pasiva también depende de ligamentos más externos que refuerzan la cintura escapular:
- 🔹 Ligamento acromiocoracoideo
- 🔹 Ligamentos coracoclaviculares: conoide y trapezoide
- 🔹 Ligamento bicorne: derivado del subclavio, con inserciones bifurcadas
- 🔹 Ligamentos esternoclaviculares: anteriores, posteriores, superiores e interclavicular
- 🔹 Ligamento esternocostoclavicular: conecta clavícula con la primera costilla

Figura 2. Ligamentos del hombro y estructuras de refuerzo anterior.
Desde el punto de vista funcional, el hombro se considera un complejo articular formado por cinco articulaciones que trabajan en conjunto:
- ✅ Glenohumeral: principal enartrosis del miembro superior.
- ✅ Subdeltoidea (suprahumeral): bolsa sinovial funcional.
- ✅ Acromioclavicular: entre clavícula y acromion.
- ✅ Escápulo-torácica: deslizamiento de la escápula sobre el tórax.
- ✅ Esterno-costoclavicular: única articulación ósea con el tronco.
Los movimientos funcionales del hombro son el resultado de la acción sincronizada de estas cinco estructuras. Por ejemplo, la abducción completa del brazo (180°) se descompone en:
- 🔹 120° aportados por la articulación glenohumeral.
- 🔹 20° por la articulación acromioclavicular.
- 🔹 40° por la articulación esternocostoclavicular (aprox. 4° cada 10°).
Esta relación se denomina ritmo escápulo-humeral, y cualquier alteración en ella puede indicar disfunción o patología.
Además, la movilidad del hombro se ve influida por factores como la edad, la flexibilidad, la retracción capsular o las alteraciones musculares.
La articulación glenohumeral, por su estructura de enartrosis, permite una amplia gama de movimientos. No obstante, estos están condicionados por la edad, la flexibilidad y el entrenamiento.
- 🔹 Flexión anterior: elevación del brazo hacia adelante — hasta 180°.
- 🔹 Extensión (retropulsión): elevación hacia atrás — hasta 45°-50°.
- 🔹 Abducción: separación lateral del brazo — hasta 180°, con rotación externa obligatoria a partir de cierto ángulo por el troquiter.
- 🔹 Aducción: aproximación al cuerpo — 0° en posición anatómica; 40-45° con antepulsión y 15° con retropulsión.
- 🔹 Rotación interna: mano hacia la espalda con codo en 90° — hasta 95°.
- 🔹 Rotación externa: limitada con la edad — hasta 80° en jóvenes y 45° en mayores.
Durante la abducción, el brazo rota externamente para evitar el choque del troquiter contra el acromion. Al alcanzar los 180°, se llega a la pivotal position, donde se bloquean la rotación interna y externa.
Un fenómeno interesante es la Paradoja de Codman: si se eleva el brazo en abducción hasta 180° y se baja por delante, el pulgar termina hacia atrás. Esto demuestra que, aunque no giremos el brazo activamente, ocurre una rotación pasiva durante el movimiento.
En la exploración clínica del hombro, es clave entender no solo su anatomía, sino también los patrones funcionales que rigen su movimiento:
- 🔹 Ritmo escápulo-humeral: coordinación entre la escápula y el húmero durante movimientos como la elevación.
- 🔹 Bolsas sinoviales: permiten el deslizamiento entre músculos y huesos. Destaca la bolsa subacromiodeltoidea, cuya inflamación causa bursitis.
- 🔹 Organización muscular en reloj: los músculos y ligamentos se disponen como las horas de un reloj en torno a la articulación glenohumeral.
Ejemplo de esta analogía horaria (hombro izquierdo, vista lateral):
- 🕘 9-11 h: Músculo subescapular
- 🕚 11 h: Ligamento coracohumeral
- 🕛 11-1 h: Músculo redondo mayor
- 🕐 1-3 h: Músculo infraespinoso
- 🕒 3-5 h: Músculo redondo menor
El labrum glenoideo amplía la cavidad glenoidea, y la estabilidad depende del ligamento coracohumeral, el manguito de los rotadores y el tendón largo del bíceps. Cualquier adherencia capsular o sinequia puede limitar gravemente el rango de movimiento.
El hombro es una unidad funcional compleja donde convergen múltiples articulaciones y sistemas estabilizadores. Conocer su estructura anatómica, la interacción muscular, los ligamentos de refuerzo y el ritmo escápulo-humeral es esencial para la correcta evaluación, diagnóstico y tratamiento de sus lesiones.