www.cto-am.com
Dr. Arturo Mahiques

¿Qué son los isquiotibiales?

Los isquiotibiales son un grupo de tres músculos ubicados en la parte posterior del muslo: bíceps femoral, semimembranoso y semitendinoso. Estos músculos cruzan dos articulaciones (cadera y rodilla), y están implicados en la extensión de la cadera y flexión de la rodilla.

Su estado de tensión influye directamente en la postura, el rendimiento deportivo y la salud de la región lumbar y pélvica.

¿Por qué estirarlos?

  • Mejoran la flexibilidad de la cadera y rodilla.
  • Reducen la tensión sobre la pelvis y zona lumbar.
  • Previenen lesiones como distensiones, desgarros o tendinopatías.
  • Mejoran el rendimiento en actividades como correr, saltar o patear.

Relación con la postura y el dolor lumbar

Una rigidez en los isquiotibiales puede limitar la basculación pélvica posterior y dificultar la flexión lumbar correcta. Esto puede generar:

  • Compensaciones en la columna lumbar y torácica.
  • Aumento del estrés en los discos intervertebrales.
  • Tensión en la zona sacroilíaca y glúteos.

Por ello, estirar los isquiotibiales es esencial en programas para lumbalgia crónica, disfunciones posturales y entrenamiento funcional.

Indicaciones clínicas y deportivas

  • Rigidez postural (sedentarismo, trabajo sentado).
  • Recuperación de lesiones musculares en muslo o espalda.
  • Atletas que requieren explosividad o agilidad (fútbol, sprint, salto).
  • Personas con acortamiento muscular o desequilibrios musculares.

Ejercicios de Estiramientos de los Isquiotibiales

1. Estiramiento de isquiotibiales sentado (Toe Touch)

Siéntate en el suelo con las piernas extendidas hacia adelante.

Inclínate hacia adelante desde las caderas, intentando tocar los dedos de los pies.

Mantén la espalda recta (no redondeada) y lleva el pecho hacia las piernas.

Duración: 20-30 segundos por repetición.

Toe Touch sentado

2. Estiramiento de pie (Hamstring Stretch)

Coloca un pie sobre una superficie elevada (como un banco o escalón) con la pierna recta.

Inclínate hacia adelante manteniendo la espalda recta hasta sentir el estiramiento.

Variante: Puedes hacerlo sin apoyo, llevando una pierna hacia adelante y flexionando ligeramente la otra.

Estiramiento de pie

3. Estiramiento con banda o toalla (Towel Hamstring Stretch)

Acuéstate boca arriba, levanta una pierna y coloca una banda o toalla alrededor del pie.

Estira la pierna hacia el techo, manteniendo la rodilla recta.

Beneficio: Ideal para controlar la intensidad del estiramiento.

Banda o toalla

4. Estiramiento en posición de mariposa (Seated Butterfly Stretch)

Siéntate con las plantas de los pies juntas y las rodillas hacia los lados.

Inclínate hacia adelante para estirar los isquiotibiales y la parte interna de los muslos.

Mariposa

5. Estiramiento dinámico (Leg Swings)

De pie, balancea una pierna hacia adelante y hacia atrás de manera controlada.

Uso: Ideal como calentamiento antes de entrenar.

Balanceo de piernas

6. Postura del perro boca abajo (Downward Dog)

En posición de plancha, eleva las caderas hacia el techo formando una "V" invertida.

Presiona los talones hacia el suelo para estirar los isquiotibiales.

7. Estiramiento con rodilla flexionada

Siéntate con una pierna extendida y la otra flexionada con el pie contra el muslo interno.

Inclínate hacia la pierna estirada.

Estiramiento con rodilla flexionada

Frecuencia y progresión

  • Realizar estiramientos entre 3 y 5 veces por semana.
  • Mantener cada estiramiento entre 30 y 60 segundos, evitando el rebote.
  • Progresar desde ejercicios pasivos a activos, y luego funcionales.
  • Respirar profundamente y mantener el abdomen activado.

Errores comunes

  • Redondear la espalda al estirar.
  • Rebotar o forzar más allá del umbral de tensión.
  • Estirar en frío sin calentamiento previo.
  • No involucrar respiración ni control pélvico.

Estiramientos específicos para deportistas

Los deportistas deben integrar los estiramientos de isquiotibiales como parte del calentamiento activo y vuelta a la calma. Además, se recomienda:

  • Incluir movilidad articular dinámica (caderas, rodillas).
  • Trabajar la sincronización entre glúteos e isquiosurales.
  • Combinar con ejercicios excéntricos para prevenir lesiones (ej. nordic hamstring).

Beneficios del estiramiento regular

  • Mayor elasticidad y rendimiento funcional.
  • Disminución del dolor lumbar y sobrecarga pélvica.
  • Mejora en sentadillas, peso muerto y carrera.
  • Prevención de lesiones musculares.

Conclusión

Los isquiotibiales desempeñan un papel clave en la movilidad, estabilidad y salud postural. Un programa de estiramientos adaptado, progresivo y bien ejecutado es esencial tanto en prevención como en recuperación funcional.

💡 Alarga tus isquios, libera tu pelvis y protege tu espalda baja.